El 7 de octubre de 2023, Hamás, reconocido por los EE.UU. como organización terrorista, inició un gran ataque contra Israel. Lanzaron cohetes y mandaron militantes armados para atacar zonas civiles, resultando en más de 1,400 muertes de civiles israelíes y el secuestro de 200 personas. En respuesta, Israel declaró la guerra, atacando a Hamás y la Jihad Islámica en Gaza. El conflicto escaló con ataques aéreos israelíes que cortó agua y suministros de combustible para Gaza. Desde el comienzo de la operación israelí, Gaza ha visto más de 30,000 muertes de civiles palestinos, incluyendo más de 12,500 niños y 7,000 mujeres. Además, más de 7,000 individuos están sin aparecer y presumidos muertos debajo de los escombros, a pesar de una declaración de Israel que establecía que el ataque estaba enfocado en objetivos militares. El conflicto sigue siendo un tema de intenso debate. Sin embargo, no deberia ser; la invasión israelí de la Franja de Gaza es, sin duda, un intento de genocidio y la communidad internacional a fallado en responder adecuadamente a los ataques genocidas de Israel. Pero ¿qué exactamente es genocidio? y ¿cómo califica la invasión israelí como uno?
De acuerdo con la definición de las Naciones Unidas (UNO), genocidios intentan destruir en parte o en todo, un grupo nacional, étnico, racial, o religioso utilizando medios como matar miembros del grupo, causar daño mental o corporal hacia los miembros del grupo, causando condiciones de vida que destruirá el grupo, etc. A pesar de las afirmaciones de las Fuerzas de defensa de Israel (FDI) de que la ofensivo de Israel es un acto de autodefensa, la invasión israelí de Gaza muy claramente en estos criterios de genocidio: bombardear lugares seguros designados para civiles en casi toda la región y matando a mujeres y niños palestinos minuto a minuto de hambre, al prevenir que comida, agua y medicinas pasen el bloqueo a Gaza. Estas acciones parecen más un genocidio, a pesar de las afirmaciones de autodefensa. Matar más de 30,000 ciudadanos no parece autodefensa, es genocidio.
El genocidio fue reconocido oficialmente crimen según la ley internacional en 1949 por la Asamblea General de la ONU. Subsequentamente, fue establecido como una ofense distinta y castigable en la Convención para la Prevención y la Sanción del Delito de Genocidio de 1948, más frequentamente conocido como la Convención sobre Genocidio. Los Estados Unidos está entre los estados que han ratificado la convención pero activamente apoyan el genocidio.
Una grave crisis humanitaria ha surgido, marcada por el colapso de los servicios de salud, escasez de recursos esenciales como comida, agua limpia, medicina, y combustible en Gaza debido al bloqueo. La región se encuentra con cortes de electricidad y falla en los medios de comunicaciones y la ONU habla sobre el inminente riesgo de hambruna. Reportes indican que a pesar de instrucciones previas de Israel para palestinos de evacuaciones en cierta zonas, se percibe que “ningún lugar es seguro en Gaza, ya que estas zonas han sido el objetivo. Los daños importantes a la población civil ha generado una condena global y acusaciones de crímenes de guerra dirigidas hacia Israel de varios países en el mundo.
Acerca de las respuestas de la comunidad internacional a la invasión israelí, el evento más significativo ha sido el caso de genocidio de Sudáfrica contra Israel, que se llevó ante la Corte Internacional de Justicia (CIJ) el 26 de diciembre de 2023 Sudáfrica describió la situación en Gaza, antes de la invasión, como una segregación racial de 75 años, una ocupación de 56 años y un bloqueo de 16 años de la Franja. El CIJ le pidio a Israel que tome todas las medidas necesarias para prevener actos de genocidio el 26 de enero de 2024. A pesar de esto, el problema todavía no se resuelve. Mientras tanto, los EE.UU. apoyan el genocidio en Gaza ofreciendo miles de millones en ayuda militar para Israel, un acto criticado por muchos americanos que han protestado en las calles.
El 25 de febrero de 2024, un aviador estadounidense llamado Aaron Bushnell que había estado en servicio activo desde 2020 se autoinmoló, es decir, prendió fuego, en protesta de víctimas civiles en Gaza afuera de la embajada de Israel en Washington. Antes de prenderse fuego, el dijo, “Ya no seré cómplice del genocidio […] Voy a participar en un acto de protesta extrema, pero en comparación con lo que la gente ha estado experimentando en Palestina a manos de sus colonizadores, no es nada extremo.” Protestas deplorando el genocidio han estallado internacionalmente en los últimos 4 meses tras el incio de la invasión. Personas alrededor del mundo reconocen la inhumanidad que está ocurriendo en Gaza, uniéndose para demandar un alto de fuego y terminar el bloqueo de Gaza. Ponen sus vidas en riesgo con la esperanza de traer conciencia hacia la gente que sufre en este preciso momento en el genocidio de Gaza.
Mientras que las protestas mundiales contra las atrocidades en Gaza cobran impulso, se vuelve imperativo que las personas participen en algún tipo de activismo, ya sea a través de protestas, apoyo, escribiendo cartas a los representantes o creando conciencia a través de las redes sociales para condenar el genocidio y exigir justicia para sus victimas. Al solidarizarnos y actuar, podemos y debemos trabajar colectivamente para poner fin a tales atrocidades y defender el valor de la dignidad humana y los derechos de todos. Por encima de todo, las acciones de nuestra juventud determinan el futuro de nuestra sociedad. Nosotros, la juventud, debemos tomar medidas para crear un futuro intolerante al genocidio.
Traducido por Catherine Escoto.
